Participó como artista invitado por la banda Black Eyed Peas en 2011, pero el concierto en solitario era un sueño que tenía de años
Usher, popularmente conocido como el Rey del R&B, homenajeó al Rey del Pop, Michael Jackson, y a la cultura afroamericana el pasado domingo durante su actuación en el Super Bowl.
El cantante norteamericano se subió al escenario con un guante blanco con brillos en su mano izquierda y lo lució durante la mayor parte de la actuación, una prenda que popularizó Jackson y replicó varios pasos de baile del ícono del pop, incluyendo el famoso moonwalk.
Usher puso a bailar al estadio Allegiante de Las Vegas al ritmo de éxitos de los 2000 como “Yeah!”, “Love in This Club” y “My Boo” en un espectáculo de 15 minutos, el más largo del Super Bowl en años, reseña la agencia EFE.
En una energética presentación, en la que el artista bailó incluso montado en patines, subieron también al escenario influyentes cantantes de la música afroamericana como Alicia Keys, Ludacris y Lil John.
Keys, vestida con un traje rojo, tocó el piano en vivo y cantó junto a Usher su éxito “If I Ain’t Got You”
Pocos minutos después de iniciar la presentación, Usher saludó a su madre.
“Lo logré, mamá”, dijo el cantante, mirando a las cámaras que retransmitieron el espectáculo a millones de televidentes.
Usher no es ajeno al concierto de medio tiempo del Super Bowl, participó como artista invitado por la banda Black Eyed Peas en 2011, pero el concierto en solitario era un sueño que tenía de años, según contó a medios estadounidenses.
Banda de marcha, empezó en el campo, con un montón de bailarines, ropa al estilo de los años 20. Luego se cambió y se subió en patines al escenario.