El reconocido cineasta y actor Rob Reiner, director de clásicos como La princesa prometida, Cuando Harry conoció a Sally y Cuestión de honor, fue hallado muerto junto a su esposa, Michele Singer, en su residencia de Brentwood, al sur de California. La noticia, difundida inicialmente por la cadena local NBCLA y confirmada por otros medios estadounidenses, ha conmocionado al mundo del cine y la política.
Según fuentes citadas por NBC y la revista Variety, la pareja habría sido encontrada con heridas de arma blanca, aunque la Policía de Los Ángeles evitó confirmar la identidad de las víctimas mientras continúa la investigación. “Nadie ha sido detenido, nadie está siendo interrogado como sospechoso”, declaró el subjefe Alan Hamilton, quien aseguró que se trata de una investigación por homicidio en curso.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, expresó su pesar: “Estoy dolida por la trágica pérdida de Rob y su esposa Michele. Conocí a Rob y le tengo un tremendo respeto. Aclamado actor, director, productor, escritor y activista político, siempre usó sus dones en el servicio a los demás”.
Reacciones desde la política y el cine
La noticia generó una ola de mensajes de condolencia que reflejan la enorme influencia de Reiner en la cultura estadounidense:
- Barack Obama, expresidente de EE. UU., escribió en X: “Michelle y yo estamos desconsolados por el trágico fallecimiento de Rob Reiner y su amada esposa, Michele. Los logros de Rob en cine y televisión nos brindaron algunas de nuestras historias más preciadas en la pantalla”.
- Kamala Harris, exvicepresidenta, destacó: “La obra de Rob Reiner ha impactado a generaciones de estadounidenses. Los personajes, los diálogos y las imágenes que dio vida están presentes en nuestra cultura”.
- Gavin Newsom, gobernador de California, confesó sentirse devastado:“Rob fue el genio de gran corazón detrás de tantas de las historias clásicas que amamos”.
En el mundo del espectáculo, la actriz Roseanne Barr señaló que le “faltan las palabras”, mientras que el actor James Woods, protagonista de Ghosts of Mississippi, dirigida por Reiner, recordó su amistad: “Las diferencias políticas nunca obstaculizaron nuestro amor y respeto mutuo”.
Un legado imborrable
A los 78 años, Rob Reiner deja tras de sí una filmografía que marcó generaciones y un compromiso político y social que lo convirtió en una figura respetada más allá de Hollywood. Su muerte y la de su esposa Michele Singer abren un capítulo doloroso en la historia del cine estadounidense, mientras las autoridades continúan investigando las circunstancias de este trágico suceso.






