La obra del escritor, novelista, cuentista, ensayista y cronista venezolano, quien murió el 13 de mayo de 2001, está catalogada como una de las mejores logradas y complejas. En su producción literaria el autor plasmó su visión cruda y sin adornos, pero muy bien documentada, de todo aquello que le rodeaba y que, según él, influía en el comportamiento humano
Una de las características que algunos críticos rescatan de la obra de Salvador Garmendia es una supuesta «tónica pesimista ante lo venezolano». No es el caso. La verdad es que lo que sí caracterizó la obra de este importante representante de las letras venezolanas, fue su capacidad para decir la verdad sin anestecia.
Su literatura se ubica, algunas veces, en mundos sórdidos que generalmente son espejos de la urbe donde se narra el subsistir de sus personajes y la burocracia que envuelve sus vidas. Se trata de la ruptura de modelos anteriores, una forma de hacer crítica y reflejo de la sociedad los problemas que le atañen y le definen.
Nacido un 11 de junio de 1928, en el aniversario 18 de la partida física de este maestro de las letras. Contrapunto entrega cinco de sus títulos más leídos, todos legado de la literatura nacional.
Los pequeños seres (1959)
Los habitantes (1961)
Días de cenizas (1963)
La mala vida (1968)
El capitan Kid (1988)