Las muertes ocasionadas por el derrumbe de una discoteca en República Dominica subieron a 226, informaron este sábado las autoridades, que completaron en la madrugada la entrega de los cuerpos.
El techo del club nocturno se derrumbó la madrugada del 8 abril durante un concierto del popular cantante de merengue Rubby Pérez, quien también murió en el lugar.
«Eran 221 muertos de zona cero (lugar del siniestro) y 4 que surgieron de hospitales», dijo en una rueda de prensa el ministro de Salud Pública, Víctor Atallah. Su despacho dijo posteriormente que una ciudadana de Costa Rica también murió este sábado, lo que sube a 226 los fallecidos.
El número de decesos aún puede ser mayor pues varios heridos presentan pronóstico reservado, agregó Atallah.
Entre lágrimas, velas y oraciones, decenas de personas se congregaron en la zona cero del desplome la noche del viernes para honrar a las víctimas.
«Esta ha sido la tragedia más grande que he podido visualizar en los años que tuve. La gente gritaba ‘sáquenme de aquí, que estoy viva. ¡Ayúdenme!'», recuerda Arlenne Matos, de 47 años, una vecina de la zona que oraba entre lágrimas en un altar improvisado frente a los escombros de la discoteca Jet Set.
Durante los dos días y medio que duraron las tareas de búsqueda, más de 300 rescatistas hallaron a 189 sobrevivientes.
Matos recuerda que el siniestro provocó un «temblor», una «explosión», pero recién entendió lo que sucedía al amanecer. «Fue demasiado desgarrante», añade.
Varios de sus familiares y conocidos habían asistido a la discoteca pero se retiraron antes de que ocurriera la tragedia. «Dios les dio la oportunidad de que tuvieran vida», dice aliviada.
Caía la tarde del viernes y vehículos se detenían frente al altar. Sus ocupantes observaban la zona del desastre llorando, mientras otros se acercaban a dejar velas, globos negros y blancos, flores y pancartas con mensajes.
– «Entregados todos los cuerpos» –
La identificación y entrega de los fallecidos terminó la madrugada del sábado. «Todos los cuerpos fueron entregados», informó Atallah.
Entre las víctimas mortales están dos exbeisbolistas y una gobernadora dominicana que ya fueron velados. Rubby Pérez recibió sepultura el jueves luego de que se instalara una capilla ardiente en el Teatro Nacional de Santo Domingo, donde se congregó una multitud entonando canciones del artista dominicano como «Volveré«.
El gobierno anunció la creación de una comisión de expertos nacionales y extranjeros para investigar las causas de la tragedia.
El presidente Luis Abinader se comprometió a buscar «respuestas a qué pasó, por qué pasó, cómo pasó».
«Flores pintadas para cada ángel arriba. Que el descanso sea eterno, desde aquí los recordaremos y nos haremos eco de esta gran injusticia que debe ser explicada», reza la pancarta de una joven.
Desde el aire puede verse el agujero que dejó el techo colapsado de la discoteca y en el medio máquinas de aire acondicionado y plantas eléctricas.
El domingo se celebrará una misa en Haina, municipio limítrofe con la capital. Abinader prevé asistir al acto.
También se espera la presencia del alcalde de Nueva York, Eric Adams. «En la ciudad de Nueva York reside la mayor población dominicana fuera de la República Dominicana, y este domingo voy a viajar a la isla», dijo en X.