El representante gremial informó que los miembros de la OIT se reunieron de forma independiente con el Gobierno y Fedecámaras, y que durante toda esta semana sostendrán reuniones con los testigos
El expresidente de Fedecámaras, Jorge Roig, se mostró confiado en que tras la visita al país de la Comisión de Encuestas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el Gobierno reconozca las violaciones laborales, llame a un diálogo social y acepte conversar con trabajadores y empleadores.
«Si quieren seguir en la OIT van a tener que llamar a un diálogo social, sentarse con los trabajadores y con los empleadores, no podrá ordenar un salario mínimo cuando quieran y no podrán seguir persiguiendo a empresarios en puestos dirigenciales de los gremios del país», dijo en entrevista telefónica a Contrapunto.
En relación a la visita de la comisión, el representante gremial informó que los miembros de la OIT se reunieron con representantes del Gobierno el lunes 8 de julio en la mañana y con Fedecámaras ese mismo día en la tarde, y durante toda esta semana sostendrán reuniones con los testigos propuestos por Fedecámaras para demostrar sus alegatos.
Roig detalló que en noviembre próximo, la OIT entregará el informe acerca de la denuncia impulsada por Fedecámaras, y las partes deberán asistir a Ginebra donde se presentará el dictamen de la Comisión de Encuestas. En ese sentido, aseguró que el informe va a demostrar las violaciones a los derechos laborales por parte del Gobierno.
Indicó que la decisión de la OIT no es de carácter vinculante, es decir que el Gobierno puede o no atender a las recomendaciones del organismo, no obstante, considera «complicado para el Gobierno desvirtuar un dictamen de la OIT» cuando su línea de trabajo se dirige al reconocimiento de la clase obrera.
Sobre la Comisión de Encuestas, a la que considera más bien una «misión de investigación», explicó que es el máximo organismo de control de la OIT, adscrito a la Organización de las Naciones Unidas, para dirimir conflictos laborales.
Fedecámaras interpuso, hace 13 años, una demanda por violaciones del Gobierno especialmente a tres convenios, el 87 relacionado con la persecución a líderes sindicales; el 126, que establece la necesidad de una consulta tripartita para determinar aumentos del salario mínimo; y el 144 que dispone la necesidad de un diálogo social en el país.
Roig relató que la visita de esta semana forma parte de un largo proceso iniciado por la cúpula empresarial. Detalló que en 2014 una comisión visitó Venezuela para corroborar las violaciones a los convenios y emitió un promunciamiento que a su juicio fue ignorado por el Gobierno.
Señaló que al no poderse gestionar una nueva misión para el año 2018, la demanda se dirigió a esta instancia en la que se estipula que tres magistrados visiten el país para investigar las violaciones denunciadas.
Tras un careo por internet y una reunión de las partes en Ginebra, realizada en mayo, la comisión se trasladó a Venezuela para corroborar las denuncias formuladas.
Resaltó Roig que, en cien años de la OIT, es la décimo tercera vez en la historia de la organización que se constituye una misión de la Comisión de Encuesta y la segunda vez que es promovida por empleadores, el resto fueron iniciadas por trabajadores.
Señaló que con los trabajadores también se están violando convenios, sólo que se trata de un proceso largo y costoso y los trabajadores no tienen la infraestructura para llevar a cabo un proceso legal de este tipo.
«Se están violando derechos laborales, contratación colectiva, hay trabajadores presos. Yo creo que más que los empleadores, todavía están sufriendo más los trabajadores», dijo.