El Gobierno de la isla asegura que «no recibe ingresos significativos del comercio del oro» y que el comercio del metal venezolano está «amenazado por riesgos en lo que a la seguridad se refiere»
El primer ministro de Curazao, Eugene Rhuggenaath, anunció este viernes que su Gobierno prohibió la importación, exportación y tránsito de oro de Venezuela.
El funcionario firmó la orden ministerial que establece esta prohibición con efecto «inmediato», y que formará parte de una medida legislativa más amplia y detallada.
En declaraciones a los medios tras suscribir el veto, dijo que Curazao como lugar de paso «no recibe ingresos significativos del comercio del oro»; subrayó que el comercio del metal venezolano está «amenazado por riesgos en lo que a la seguridad se refiere».
En Venezuela está creciendo la extracción de oro, animada por las restricciones a la industria del petróleo y buena parte del mineral es transportado a través de Curazao a otros países del mundo.
«Pero Curazao como lugar de paso no recibe un ingreso significativo por este comercio, por lo que los efectos económicos y financieros de ello son muy limitados», agregó el primer ministro.
Además afirmó que se ha demostrado que la industria del oro en Venezuela ha estado, tradicionalmente, vinculada a la «huída de capital, opresión y explotación, e, incluso, la minería ilegal».
«Hay también indicios de que el comercio y transporte del oro está en algunos casos acompañado de varias formas de crimen organizado y transfronterizo», agregó.
A su vez, manifestó que ello lleva a riesgos relacionados con la seguridad y la integridad «que nos causan gran preocupación tanto a nivel nacional como internacional».
Por ello, «debido a los altos riesgos, el Gobierno de Curazao va a tomar todas las medidas necesarias para prevenir que sufra daños relacionados con su reputación a nivel internacional en relación al comercio y transporte de oro de Venezuela».
A finales de 2018, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó que el oro venezolano se debe extraer de minas «permisadas» y vendido a la estatal Minerven y «no de manera ilegal para que aparezca luego en Aruba, en Curazao».
Estados Unidos calculaba entonces que en los últimos meses del año pasado habrían salido de Venezuela «21 toneladas métricas de oro», que han ido «principalmente a Turquía» en exportaciones «sin contabilidad alguna para saber adónde van a parar los fondos».