El dirigente político, Omar Ávila, secretario General Nacional de Unidad Visión Venezuela y diputado a la Asamblea Nacional (AN), formuló un nuevo llamado a un «diálogo inclusivo que aborde y resuelva el conflicto internacional venezolano», enfatizando en que «las conversaciones deben trascender el ámbito meramente político para concentrarse en la grave situación social y económica del país».
El dirigente político reiteró la postura de su organización en favor de la vía «pacífica, constitucional y democrática» como «única forma de solucionar los problemas nacionales».
Igualmente subrayó «la urgencia de reorientar el proceso de diálogo hacia el ámbito interno, con el objetivo de atender las necesidades de los ciudadanos».
«Siempre hemos abogado y hemos estado de acuerdo por la vía pacífica, la vía constitucional, la vía democrática. Es la única forma que tenemos para poder solucionar los problemas. Sin embargo, las conversaciones no pueden estar supeditadas solo a lo político. El proceso de diálogo, una vez más, tiene que volver a lo interno para tratar el ámbito social y económico del país,» declaró Ávila.
El diputado también saludó «la reciente apertura del Gobierno de los Estados Unidos para que los gobiernos se sienten a dialogar y lleguen a acuerdos, resaltando que la prioridad de Unidad Visión Venezuela es el bienestar de los ciudadanos».
Ávila también elaboró sus argumentos en referencia a las madres venezolanas y las denominó «damas de los malabares» que realizan para «sacar adelante a sus hijos ante la falta de un salario digno que cubra las necesidades básicas».
Asimismo, criticó «la burocracia que consume el tiempo de los venezolanos en trámites esenciales, como la emisión de la cédula o el pasaporte, y el precario estado de los sistemas de salud, transporte y servicios públicos que están en manos del Estado».
«El tiempo de los ciudadanos no se puede ir en colas y más burocracia», afirmó el parlamentario, instando a las autoridades a «medir dónde estamos parados» para poder mejorar.
Por ello formuló la propuesta del «tablero de bienestar», contentivo con 5 a 7 indicadores sencillos y medibles, para enfrentar estos problemas de forma coordinada, donde deben involucrarse todos los niveles de Gobierno, desde las alcaldías hasta el gobierno nacional.
“Esta propuesta permitirá evaluar la situación de los servicios, la salud y los trámites ciudadanos. El objetivo es que el Gobierno central preste atención a las soluciones a estos problemas, permitiendo conocer dónde se está hoy y dónde se estará en un lapso de tres meses”.
Aseveró que se trata de una propuesta democrática donde la gente sepa, decida y evalúe. “No se puede mejorar lo que no se mide. El gobierno local, regional y central deben realizar un trabajo coordinado en este sentido”, explicó.
«No se puede seguir esperando el milagro económico ni el gobierno perfecto para recuperar el tiempo y optimizar la calidad de vida de los ciudadanos», enfatizó.
Finalmente, en cuanto a los conflictos geopolíticos internacionales, el diputado apostó a que «todo se resuelva de manera pacífica, en sintonía con su visión para la resolución del conflicto interno».






