En una noche vibrante bajo las luces del circuito urbano de Marina Bay, el británico George Russell (Mercedes) se alzó con la victoria en el Gran Premio de Singapur, decimoctava fecha del Mundial de Fórmula 1. Con una actuación impecable desde la pole, Russell logró su segunda victoria de la temporada y quinta en su carrera, consolidándose como un contendiente sólido en la recta final del campeonato.
El podio lo completaron Max Verstappen (Red Bull), quien resistió los embates de los McLaren, y Lando Norris, tercero, en una carrera marcada por la tensión interna en la escudería británica. Oscar Piastri, líder del campeonato, finalizó cuarto tras ser superado por Norris en la primera vuelta, lo que generó un cruce de palabras por radio y dejó entrever fisuras en la armonía del equipo.
McLaren, campeón de constructores por segundo año consecutivo
Aunque la victoria fue para Mercedes, el tercer y cuarto puesto de los McLaren bastaron para que la escudería británica asegurara matemáticamente el título de constructores. Con 650 puntos, McLaren se consagra bicampeón y suma su décima estrella histórica, quedando solo detrás de Ferrari en el palmarés3.
Campeonato de pilotos tras Singapur:
- Oscar Piastri (McLaren): 336 pts
- Lando Norris (McLaren): 314 pts
- Max Verstappen (Red Bull): 273 pts
- George Russell (Mercedes): 237 pts
Con seis fechas por disputar, la lucha por el título individual se intensifica. Piastri mantiene el liderato, pero su ventaja sobre Norris se reduce a 22 puntos, mientras Verstappen acecha con 273 unidades. La próxima parada será el GP de Estados Unidos en Austin, donde se disputará una carrera sprint que podría alterar aún más el tablero.
Franco Colapinto, con sabor agridulce
El argentino Franco Colapinto (Alpine) terminó 16°, beneficiado por sanciones a pilotos de Williams, pero afectado por una estrategia fallida de su equipo. A pesar de su esfuerzo, sigue sin sumar puntos en la temporada.
La Fórmula 1 entra en su fase decisiva con tres candidatos al título y una escudería que ya celebra. Marina Bay dejó más que una carrera: dejó una historia de rivalidades, estrategia y gloria compartida.






