Desde Ginebra (Suiza), el representante permanente de Venezuela ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), embajador Alexander Yánez, cuestionó a esta instancia multilateral por no tomar medidas efectivas contra Israel y su genocidio en Gaza, pero sí, contradictoriamente, buscar adoptar acciones contra Caracas, basándose en una misión creada por motivaciones políticas orientadas a un cambio de Gobierno.
El diplomático denunció que «insólitamente, en un contexto de crisis financiera de Naciones Unidas, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha impuesto 10 actividades sobre Venezuela, cuyo gasto asciende a casi 10 millones de dólares».
“Si estuviésemos examinando a Israel, el número de actividades y la inversión estarían más que justificadas. Venezuela no ha atacado a nadie, no ha asesinado niños, mujeres y hombres, menos con misiles inteligentes. No ha derribado deliberadamente edificios, ni bombardeado hospitales con familias, médicos y personal de la ONU dentro”, sentenció Yánez, haciendo referencia a que, sin embargo, es Venezuela a la que el Consejo señala por influjo de Estados Unidos y sus aliados europeos.
En un video compartido por el canciller venezolano, Yván Gil, en su canal de Telegram, Yánez asegura que el mundo atraviesa por una grave crisis de derechos humanos sin precedentes y que por ende, el Consejo “no puede enviar, como lo hace, mensajes contradictorios en materia de derechos humanos, mucho menos por razones geopolíticas”.
Bajo esta narrativa, el Embajador se preguntó: “¿Qué ha hecho este Consejo ante la barbárica violación de los derechos humanos de los migrantes venezolanos?”. Y la respuesta contundente fue: “poco o nada”, al igual que con el caso de Palestina.
“¿Para qué sirve la ONU? ¿Para qué sirve el Consejo de Derechos Humanos?”, inquiere el diplomático, alegando que en medio de la coyuntura actual de asedio contra Caracas en el mar Caribe por parte de la administración de Donald Trump -bajo acusaciones infundadas de narcotráfico-, Maduro ordenó el despliegue de todas las capacidades diplomáticas de paz para disuadir un conflicto armado en la región.
“El pueblo venezolano defenderá su territorio y su riqueza petrolera con todos los medios disponibles, si es que se nos pretende imponer una agresión injustificada que no deseamos, que no propiciamos, pero que estamos dispuestos a enfrentar con la dignidad de un pueblo libertador de América”, refirió con el representante diplomático ante la ONU.






