El presidente de Guyana, Irfaan Ali, eludió este martes las preguntas sobre la legalidad de los ataques estadounidenses, que han matado a presuntos narcotraficantes en aguas del Caribe, y afirmó que lo que le preocupa es el uso de la región por parte de los criminales.
«Nos preocupa que los delincuentes utilicen aguas internacionales o la Zona Económica Exclusiva de nuestro país, destruyendo economías, destruyendo países, destruyendo personas», declaró Ali al ser preguntado sobre su preocupación por la creciente condena internacional a estos ataques liderados por Estados Unidos.
En una breve comparecencia ante la prensa, limitada solo a unos pocos medios y a escasas preguntas, Ali insistió en que Guyana «colaborará» con sus socios internacionales para «proteger esta región».
«Hemos estado en contacto con nuestros socios para que nos apoyen en materia de vigilancia aérea y sistemas de rastreo, porque no queremos que nuestro territorio, ni nuestra tierra ni nuestro mar, sean utilizados por ninguna red criminal», subrayó.
Al respecto, el presidente señaló que han emitido «una alerta sobre los vuelos sobre Guyana de presuntos narcotraficantes y aviones con drogas».






