En un circuito donde la historia se escribe a más de 300 kilómetros por hora, Max Verstappen volvió a demostrar por qué su nombre está grabado con tinta indeleble en los anales de la Fórmula 1. Este domingo, el piloto neerlandés de Red Bull Racing se impuso con autoridad en el Gran Premio de Italia 2025, firmando su tercera victoria de la temporada y la número 65 de su carrera, reseñaron agencias.
Desde la pole position —con la vuelta más rápida jamás registrada en la historia de la categoría, 1:18.792 minutos a una media de 264,681 km/h— Verstappen tejió una carrera que fue mucho más que una demostración técnica: fue una declaración de intenciones. Aunque sus opciones al título parecen lejanas, el tetracampeón del mundo se encargó de recordar que sigue siendo el piloto más completo del paddock.
La carrera comenzó con tensión desde el semáforo verde. Lando Norris, segundo en la parrilla, intentó arrebatarle la posición en la primera curva, provocando un encontronazo verbal y físico que dejó claro que Monza no sería terreno para concesiones. “Es un idiota. Me echa a la hierba y corta la curva”, se quejó Norris por radio. Verstappen, lejos de amilanarse, devolvió la posición momentáneamente, solo para recuperarla con una maniobra quirúrgica en la Variante Prima.
A partir de ahí, el neerlandés impuso un ritmo inalcanzable. Ni los McLaren de Norris y Oscar Piastri —segundo y tercero respectivamente— pudieron seguirle el paso. La escudería británica, en una decisión polémica, ordenó a Piastri ceder la posición a su compañero, lo que estrechó la brecha entre ambos en el campeonato a apenas 31 puntos.
Mientras los tifosi colmaban las gradas con la esperanza de ver a un Ferrari en el podio, Charles Leclerc solo pudo ofrecer un cuarto puesto, seguido por George Russell (Mercedes) y un Lewis Hamilton que remontó desde la décima posición para terminar sexto. El equipo de Maranello sigue sin encontrar el rumbo, y Monza, su casa, se convirtió en un espejo incómodo de sus carencias.
“Tuvimos un fin de semana increíble. El coche era muy manejable, pude controlar el ritmo y todo salió perfecto”, declaró Verstappen tras cruzar la meta con más de 20 segundos de ventaja.






