El presidente de la junta directiva de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea (Cavilac), Jaime Bracho, reportó que tras enfrentar temporadas complejas que afectaron su actividad, el sector ya presenta números positivos.
Destacó que gran parte de la leche que se ordeña en los campos venezolanos suele destinarse a las plantas procesadoras y destacó que con ello también se está «cuajando queso».
En este sentido, Bracho destacó en entrevista para Unión Radio que la leche es un producto que está en la mesa de los venezolanos gracias al esfuerzo que hace la industria nacional, de la mano con las 132.000 unidades de producción de todo el país.
Apuntó que el sector está «en números positivos», debido a que en los últimos 3 años, se ha observado una importante recuperación del mercado: «Tuvimos etapas muy difíciles con el tema del comercio ilícito. Muchos productos llegaban de forma ilícita de Colombia y de Brasil».
Bracho manifestó que a través de las conversaciones en las mesas de trabajo con el Ejecutivo Nacional, «hemos logrado que nos hayan escuchado y que se haya volcado en detener esos ilícitos comerciales» en beneficio de la producción nacional.
El gremialista aseguró que la industria láctea venezolana tiene la capacidad de cubrir la demanda nacional, sin embargo, indicó que el sector enfrenta dificultades relacionadas con «el tema financiero, el tema cambiario, que no solo afecta al sector lácteo, sino a la vida nacional».
«Vemos inversiones en la parte de la producción nacional, en la capacidad instalada. Estamos haciendo grandes esfuerzos en esa parte, buscando incrementar la producción nacional», añadió.
Leche de búfala y sus derivados
En cuanto a los productos bufalinos, el representante de Cavilac destacó que Venezuela tiene el rebaño más numeroso de búfalos de todo el hemisferio, manteniéndose incluso por encima de Brasil y, aunque su producción se está utilizando especialmente para la venta de carne, también «hay experiencias ya de exportación de productos de la leche de búfala».
Por este motivo, otros países del mundo están viendo que Venezuela tiene una industria capaz de producir no solo leche de vaca, sino también de búfala.






