Venezuela rechazó el «proceso de despojo» de Citgo, al tiempo que anunció que no reconocerá la «venta forzosa» de la empresa por considerar que no se cumplen con garantías económicas, el debido proceso y el derecho a la defensa
El Gobierno de Nicaragua condenó este martes en Managua la «confiscación ilegal» de Citgo, la petrolera venezolana que se encuentra en Estados Unidos, por parte del Gobierno estadounidense, y expresó su solidaridad a la Administración que preside Nicolás Maduro ante el «saqueo de sus recursos».
En una nota de denuncia, titulada ‘Siempre no al filibustero yanki‘, el Ejecutivo nicaragüense dijo compartir la indignación del Gobierno bolivariano, al que tildó de «hermano y compañero de rutas de liberación», frente, a lo que calificó de «políticas colonialistas e imperialistas de los Estados Unidos de Norteamérica».
Managua acusó a Washington de continuar «saqueando los recursos de los pueblos, y, en este caso, los recursos de nuestros hermanos venezolanos, con la confiscación ilegal e ilícita de la empresa de petróleos Citgo».
«Al hacer esta denuncia condenamos una vez más estos absurdos atropellos que reflejan una invariable conducta filibustera de parte de los Estados Unidos que tanto daño han hecho, y siguen haciendo, al mundo y a la comunidad humana», anotó el Gobierno en la nota suscrita por el presidente del país, Daniel Ortega, y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Ortega y Murillo enviaron su abrazo fraternal y solidario al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a su Gobierno, a sus movimientos sociales, «en la fuerza del gran espíritu liberador de nuestros grandes y extraordinarios seres que han guiado, y guían nuestros combates, nuestras batallas por justicia, verdad y derechos en todos los planos».
Ortega y Murillo: Luchamos contra el yanki, enemigo de la humanidad
«Hacemos esta denuncia y esta condena a nombre de nuestro pueblo, que ha sabido trascender, luchando, todas las injerencias, intervenciones, y ocupaciones, que las ambiciones y codicia del imperialismo yanki, a lo largo de la historia, ha desatado contra un pueblo trabajador, luchador, valiente y decidido, que como el gran pueblo de (Simón) Bolívar, (Hugo) Chávez y Nicolás, no se vende, ni se rinde, jamás», continuaron.
Ortega y Murillo concluyeron la nota exclamando: «¡Luchamos contra el yanki, enemigo de la humanidad!», que es una frase del himno del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
En la víspera, el Gobierno de Venezuela rechazó el «proceso de despojo» de Citgo, al tiempo que anunció que no reconocerá la «venta forzosa» de la empresa por considerar que no se cumplen con garantías económicas, el debido proceso y el derecho a la defensa.
La Administración de Nicolás Maduro sostuvo que, junto a la estatal Petróleos de Venezuela, fue excluido de la venta judicial de Citgo y se le impidió defender sus derechos ante los tribunales estadounidenses, en «complicidad» -prosiguió- con los antichavistas Juan Guaidó, Leopoldo López y Julio Borges.