Los resultados del primer prototipo de iMAGING, publicados en la revista Frontiers in Microbiology, indican que tiene una fiabilidad de más de 90%
Un equipo de investigadores creó un sistema a partir de inteligencia artificial (IA) que combina una aplicación móvil con un microscopio robotizado de bajo coste que permitiría diagnosticar la malaria en zonas endémicas, principalmente en África.
En 2022 se registraron 249 millones de casos de malaria a nivel mundial, de los cuales 93% se detectaron en África, donde existe un problema de infradiagnóstico debido a la escasez de recursos.
Hasta ahora, el método de referencia para el diagnóstico de la malaria es la visualización de los parásitos, por parte de un experto, en un microscopio óptico a partir de muestras de sangre. Es un procedimiento manual, largo y repetitivo que, sumado a la falta de personal técnico, provoca ese infradiagnóstico.
Ante la situación, un grupo de expertos en microbiología del Hospital Vall d’Hebron, la Universidad Politécnica de Cataluña – Barcelona Tech (UPC) y la Fundación Probitas presentó un nuevo método de diagnóstico para la malaria, reseña la agencia EFE.
Se trata de iMAGING, una aplicación para móvil que utiliza IA para procesar imágenes digitales de las muestras de sangre y determinar si hay o no infección; en caso positivo, también expondrá la densidad y el estado de la infección parasitaria.
Para captar las imágenes se diseñó un microscopio robotizado a partir de un microscopio óptico normal con piezas creadas con impresión 3D, lo que abarató su producción, reseña la agencia EFE.
La app se conecta al microscopio vía Bluetooth y, además de controlar los movimientos y enfoque del mismo para el análisis automático de la muestra, permite obtener las imágenes necesarias para el diagnóstico.
El personal técnico solo tiene que preparar las muestras. Esto reduce considerablemente su carga de trabajo y la posibilidad de errores.
Los resultados del primer prototipo de iMAGING, publicados en la revista Frontiers in Microbiology, indican que tiene una fiabilidad de más de 90% en el laboratorio y el próximo paso es probar la nueva aplicación en el terreno, en zonas endémicas.
La malaria es una enfermedad infecciosa transmitida por picaduras de mosquito y causada por parásitos del género Plasmodium; 93% de los casos se dan en África, continente que contabiliza 95% de las defunciones por esta enfermedad.
Por la globalización y la crisis climática, el mosquito portador del parásito llega a nuevas áreas. Estas, lamentablemente, cuentan con poca preparación y recursos para hacerle frente.