Google también accedió a hacer otros cambios para que les sea más fácil a los consumidores bajar e instalar apps de Android de otras tiendas aparte de su Play Store los próximos cinco años
Google accedió a pagar 700 millones de dólares y a hacer otras concesiones para poner fin a acusaciones de que ha estado inhibiendo a la competencia contra su tienda de apps Android —el mismo tema que fue a juicio en un caso distinto que podría derivar en cambios aun más profundos.
Si bien Google llegó al acuerdo con los fiscales generales de varios estados de Estados Unidos en septiembre, los detalles no se hicieron públicos hasta el lunes por la noche, en documentos presentados en un tribunal federal de San Francisco. La revelación ocurre una semana después que un tribunal federal amonestó a Google por aplicar tácticas monopólicas en su tienda Play Store para apps de Android.
El acuerdo con los gobiernos estatales incluye 630 millones de dólares para compensar a los consumidores que fueron guiados a un sistema de procesamiento de pagos que, según los fiscales, infló los precios para transacciones digitales dentro de apps bajadas de la Play Store. Esa tienda se adecua al software de Android que controla la mayoría de los smartphones del mundo.
Al igual que hace Apple con su tienda de apps en los iPhones, Google cobra comisiones de entre 15% y 30% sobre ventas de apps, y los fiscales sostienen que esas comisiones inflan los precios más de lo que hubieran subido si hubiese un mercado abierto para el procesamiento de pagos. Las comisiones derivaron en miles de millones de dólares en ganancias para Google anualmente, según evidencia presentada en el juicio.
Los consumidores elegibles recibirán por lo menos 2 dólares, según el acuerdo, y podrían recibir más según lo que gastaron en la Play Store entre el 16 de agosto y el 30 de septiembre de 2023. Los consumidores recibirán notificaciones automatizadas sobre las diversas opciones que tienen para recibir su compensación.
Otros 70 millones de dólares incluidos en el acuerdo cubrirán las penalidades y otros egresos que Google está siendo obligado a pagar a los estados.
Google también accedió a hacer otros cambios para que les sea más fácil a los consumidores bajar e instalar apps de Android de otras tiendas aparte de su Play Store los próximos cinco años. Se abstendrá de emitir las alertas que ha estado enviando cuando otras alternativas están siendo usadas.