El comunicado también establece que «los intentos de garantizar la seguridad militar en Europa sin tener en cuenta los intereses de Rusia no conducirán a nada bueno a sus iniciadores»
Este martes 7 de noviembre, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia emitió un comunicado en el que anunció la retirada de Rusia del Tratado de la Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE).
«El documento jurídico internacional, suspendido por nuestro país en 2007, pasó finalmente a la historia para nosotros», señala el comunicado.
Según la Cancillería rusa, el FACE «ya no está en los intereses» de Moscú. «EEUU, convencido de su «victoria» en la Guerra Fría, lanzó el proceso de ampliación de la OTAN y, como consecuencia, los países de la alianza empezaron a eludir abiertamente las restricciones de grupo del Tratado. Así, el Tratado FACE en su forma original perdió contacto con la realidad», aclaró el organismo.
«Al suspender el Tratado FACE, dejamos la puerta abierta al diálogo sobre la forma de restablecer la viabilidad del control de las armas convencionales en Europa. Sin embargo, nuestros oponentes no aprovecharon esta oportunidad, prefiriendo seguir construyendo su política no sobre los principios de la cooperación, sino sobre una base antirrusa basada en bloques», señala el comunicado.
El comunicado también establece que «los intentos de garantizar la seguridad militar en Europa sin tener en cuenta los intereses de Rusia no conducirán a nada bueno a sus iniciadores».
Cabe señalar que FACE es un sistema de limitaciones cuantitativas de las cinco categorías principales de armamento y equipos de las fuerzas armadas convencionales de los Estados participantes del pacto: carros de combate, vehículos acorazados de combate, artillería, helicópteros de ataque y aviones de combate.
El tratado se firmó en 1990 y se adaptó en 1997. Los Estados miembros de la OTAN no ratificaron la versión adaptada del documento y siguen adhiriéndose a las disposiciones de 1990, que contienen normas sobre armas convencionales basadas en un equilibrio entre la OTAN y la Organización del Pacto de Varsovia. Como consecuencia, Rusia se vio obligada a declarar una moratoria en la aplicación de los términos del acuerdo en 2007.
El 11 de marzo de 2015, Moscú interrumpió su participación en las reuniones del Grupo Consultivo Conjunto sobre el FACE, completando así el proceso de suspensión de su pertenencia al tratado, aunque jurídicamente sigue permaneciendo en él. Desde entonces, los intereses de Rusia en el Grupo Consultivo Conjunto estaban representados por Bielorrusia.
Fuente RT