Héctor Prieto Materano y otros cabecillas de la megabanda criminal venezolana se las estarían arreglando para que sus directrices delictivas lleguen a oídos de sus subordinados en libertad a cargo de la explotación sexual, el sicariato y la extorsión
La consigna del Tren Aragua, la megabanda venezolana con presencia en el Perú y otros países de Latinoamerica, es una sola: seguir operando delictivamente a cómo de lugar. La cárcel, para algunos cabecillas de esta organización criminal, parece no ser el parón definitivo en sus oscuros planes, sino que solo se trataría de un obstáculo a sortear.
De acuerdo a la Policía nacional, en el Perú se han puesto tras las rejas a 14 cabecillas de esta sanguinaria red criminal. En comparación con otros países, la cifra resultaría plenamente satisfactoria, sino fuera porque estos líderes del Tren de Aragua seguirían arreglándoselas para continuar activos, aún estando en prisiones de máxima seguridad.
Es de conocimiento público que ranqueados delincuentes logran mantener contacto con el exterior corrompiendo a agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Este sería uno de los métodos que estarían empleando peligrosos miembros encarcelados del Tren de Aragua para que sus directrices sigan llegando a oídos de sus subordinados.
Uno de estos casos es el del reo Héctor Prieto Materano, de 36 años, conocido en el mundo criminal como Mamut por su altura superior al metro ochenta y su robusta complexion física. Según un reciente informe de El Comercio, este seguiría dando órdenes para que no se frene la explotación sexual, el sicariato, extorsión y otros delitos en favor del Tren de Aragua.
“Yo no amenazo, yo actuo”, fue una de las últimas frases de Mamut ante la prensa, momentos previos a ser trasladado de Ancón I al penal de Challapalca, ubicado a casi cinco metros sobre el nivel del mar, entre las regiones de Puno y Tacna, luego que se revelara la existencia de audios que enviaba desde prisión a sus secuaces en libertad y sus enemigos.
De acuerdo a informes policiales, Prieto Materano no es cualquiera para el Tren de Aragua. Es un despiadado delincuente venezolano que conoció a Héctor Guerrero Flores, alias el Niño Guerrero, jefe máximo de la megabanda criminal, en el penal de Tocorón, hasta hace poco recinto que les servía de base de operaciones.
Su feroz rivalidad con Mamera
Mamut ingresó a suelo peruano en 2021, cuando aún el país estaba concentrado en el avance de la pandemia. Lo hizo de manera ilegal por la frontera con Brasil y con la venia del mismísimo Niño Guerrero de ser el principal jefe en Perú del Tren de Aragua.
Las operaciones delictivas de Prieto Materano parecían que habían sido frenadas con su captura a inicios de este año. La realidad demostró semanas después que esto no fue así.
En una sorpresiva requisa dentro del penal de Ancón I, donde era inquilino en ese momento, se le halló en su celda un celular que contenía diversos audios. El más llamativo fue en el que se le escucha amenazando con ‘picar’ (descuartizar) a José Luis Rodríguez, alias Mamera, integrante de los Gallegos, que estaría prófugo en Colombia.
“Estoy en Ancón 1, oíste. Demuéstrame figura, pues (…) Y demuéstrame que tú tienes poder. O si quieres nos igualamos. A quien te vea en la plaza, cobrándole a una mujer (trabajadora sexual), te lo voy a mandar matar, sea sano o no sea sano. En esa maldita plaza ya tú no cobras ni un coño de tu madre, oíste”, le dice Mamut a Mamera, según la transcripción de un audio difundido por El Comercio.
Los soldados de Mamut
En junio de este año, Panorama reveló que Hector Prieto Materano no estaba del todo desconectado del Tren de Aragua, pues había dejado a sus ‘soldados’ la encomienda de continuar con los negocios delictivos de la explotación sexual, el sicariato, la extorsión, el tráfico ilícito de droga y otros.
En ese grupo denominado los Solsados de Mamut, Alenny José Belisario Castillo, la Sombra, un siniestro y temido delincuente venezolano, jugaba un importante papel. Según las autoridades del orden, se encargaba de cuidar que ningun otra facción o banda rival tome la batuta de los negocios ilícitos.
Al igual que a Mamut, la Policía desarticuló a Belisario Castillo y sus demás cómplices que se refugiaban en un búnker en el distrito de Puente Piedra, al norte de Lima. De acuerdo a reportes de inteligencia, nuevos ‘soldados’ se habrían reagrupado para continuar operando bajo las directrices de Mamut.
A diferencia de Ancón I, en Challapalca a Prieto Materano de poco le puede servir tener un celular por la poca señal telefónica, pero esto no habría sido impedimento. Se presume que con ayuda de malos agentes del INPE estaría haciendo llegar sus audios a su nueva célula criminal.
¿Quién es Mamut en Perú?
Héctor Alfonso Prieto Materano, Mamut, es un sanguinario delincuente extranjero que operaba en toda la zona norte de Lima y otras periferias. Terminó siendo capturado por la Policía nacional en enero último y recluido en el penal Ancón II (ex Piedras Gordas), donde seguía haciendo de las suyas.
“El Mamut también nos amenazaba, era uno de los matones más peligrosos. Si uno no hacía lo que él decía, nos daba cachazos. Es fuerte ese Mamut, es peligroso”, dijo una trabajadora sexual venezolana que fue víctima de él.
Al ser capturado, Prieto Materano se mostró desafiante con las autoridades y la prensa. Reconoció que cuando fue interceptado en su guarida en Los Olivos estaba consumiendo ‘perico’ (cocaína), pero negó que sea lider del Tren de Aragua en Perú. Ha pasado el tiempo y Mamut es más importante para la organización criminal de lo que se pensaba.