En un extenso comunicado el Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales propone generarles inseguridad jurídica a todos los contratos que el gobierno de Guyana realice para la explotación de petróleo, como un mecanismo para obligarlo a negociar
“Una segunda derrota para la posición histórica del Estado venezolano” es la evaluación que hace el Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales (Covri), de la sentencia emitida por la Corte Internacional de Justicia (CIJ), sobre el diferendo territorial entre Venezuela y Guyana por el territorio Esequibo, llegando a solicitar la Covri la convocatoria del Consejo de la Defensa de la Nación con el propósito de examinar la grave situación planteada, reevaluar la estrategia seguida y acudir a la CIJ en la fase de méritos del caso pendiente Laudo Arbitral de 3 octubre de 1899”.
La Covri hace un recuento de todo lo relacionado con este diferendo que tiene como punto de partida el Laudo Arbitral firmado en el año 1899, el cual ha sido rechazado por Venezuela desde el mismo momento en que se suscribió, siguiendo por el Acuerdo de Ginebra, firmado en 1966, el cual fue suscrito por el Reino Unido y Guyana, pero en el cual, según la reciente sentencia de la CIJ,” el Reino Unido como antigua potencia colonial, tuvo apenas la intención de facilitar la solución de una controversia que habría “legado” a la recién independizada Guyana”, pero los hechos demuestran que tal valoración de la CIJ no se ajusta a lo ocurrido desde 1966, pues siempre el Reino Unido tuvo que ver en este diferendo limítrofe.
Más adelante, la Covri recuerda las palabras de los doctores Pedro José Lara Peña quien afirmó que “se trataba de un “truco inglés”, y como el Dr. René de Sola quien dijo que se trataba de “una maniobra habilidosa mediante el cual el Imperio usurpador ha pretendido eludir sus claras responsabilidades en la cuestión”. El canciller de la época, Ignacio Iribarren Borges, respondió que “Algunos dicen que el Acuerdo de Ginebra permitió a los británicos lavarse las manos y dejar a Venezuela que se las entendiera sola con Guyana en la reclamación del Esequibo. Eso no es cierto, a menos que nosotros mismos les proporcionemos el agua y el jabón para que lleven a cabo tal operación de limpieza y despreocupación”.
Ante la decisión tomada por la CIJ, desde el Covri exhortan al gobierno de Maduro a convocar al Consejo de Defensa de la Nación, que tendría como tarea examinar la grave situación planteada, reevaluar la estrategia seguida y acudir a la CIJ en la fase de méritos del caso, así como coordinar la actuación de todos los poderes públicos para “una defensa más activa y eficaz de nuestros derechos sobre la Guayana Esequiba”;
A lo anterior, solicitan nombrar a un nuevo agente/negociador calificado a tiempo completo; impulsar un diálogo nacional realmente inclusivo y adoptar una estrategia integral con un plan de acción concreto que defienda los intereses del país en todos los ámbitos; acordar también la conformación de un equipo nacional de expertos sin distinción ideológica para la preparación de la Contra-Memoria de méritos
Para presionar a Guyana y obligarla a sentarse a negociar, desde la Covri proponen “privarle de seguridad jurídica” a las inversiones petroleras que el gobierno de Georgetown está impulsando, así como evaluar la solicitud ante la CIJ de “la paralización de concesiones mineras y madereras en la Guayana Esequiba como medida cautelar en el marco del procedimiento contencioso”.