Policías europea y estadounidense anunciaron este jueves haber desmantelado una red mundial de cibercriminales, que robó 100 millones de dólares a más de 41.000 víctimas en todo el mundo, usando un programa maligno (malware) ruso
Durante una conferencia de prensa en La Haya, la agencia europea de cooperación policial Europol explicó que autoridades de Georgia, Ucrania, Moldavia y Estados Unidos abrieron investigaciones judiciales respecto al caso del multimillonario crimen cibernético, cinco ciudadanos rusos aún no han sido capturados.
«La red criminal utilizó el malware GozNym para robar unos 100 millones de dólares, principalmente a empresas y a sus instituciones financieras» explicó Europol.
Del otro lado del atlántico, Scott Brady, fiscal estadounidense para el distrito occidental de Pensilvania, calificó la operación de «esfuerzo internacional sin precedentes».
Explicó Brady que las víctimas europeas y estadounidenses, confiadas en que sólo hacían clic sobre una simple factura, daban acceso a sus informaciones más sensibles a los piratas informáticos.
La red de criminales cibernéticos
Entre los cinco rusos aún prófugos, se cuenta a Vladimir Gorin, creador del malware GozNym, quien según Europol: «supervisó su creación (del malware), su desarrollo, su gestión y su alquiler a otros cibercriminales».
Alexander Konovolov, de 35 años y supuesto líder de la red, quien utilizaba el seudónimo «NoNe» fue detenido en Georgia, su país natal, así como su presunto brazo derecho, Marat Kazandjian, de 31 años, conocido como «phant0m«.
Los informes policiales indican que Konovolov reclutó a piratas informáticos que ofrecían sus servicios en «foros criminales de habla rusa en internet», y llegó a controlar los ordenadores de más de 41.000 víctimas.
El dinero estafado, era luego lavado a través de cuentas en Estados Unidos, entre otros países.
En Ucrania, la policía detuvo a Gennady Kapkanov, de 36 años, conocido como «firestarter», sospechoso de albergar una red en línea conocida como «Avalanche» que proporcionaba servicios a más de 200 cibercriminales.
Según las autoridades estadounidenses, el sospechoso disparó contra la policía a través de la puerta cuando iban a detenerlo.
Europol consiguió desmantelar «Avalanche» en 2016, después de que esa red criminal consiguiera infectar medio millón de computadoras en 188 países.
Esta nueva operación es la continuación de esa primer gran golpe contra la cibercriminalidad internacional, según la agencia policial.
Uno de los rusos que están siendo buscados, Viktor Eremenko, había sido detenido en Sri Lanka a petición de Estados Unidos en 2017, pero «mediante la intervención del gobierno ruso» fue liberado bajo fianza, y luego huyó a Rusia.
Se cursó una orden de captura internacional en su contra, aunque Rusia no extradita a sus ciudadanos.