«Las reivindicaciones que dependen del Ejecutivo nacional están igualitas», enfatiza Jesús Mendoza, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV
Tantos años de lucha por las reivindicaciones estudiantiles y el año 2023 encuentra a la principal casa de estudios del país, la Universidad Central de Venezuela (UCV), con un comedor cerrado, becas equivalentes a cinco dólares y sin transporte. El resumen que hace Jesús Mendoza, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, no es precisamente alentador. Pero en conversación con contrapunto.com durante el izamiento en el campus universitario de una de las banderas más grandes de Venezuela, Mendoza ratifica que seguirán respaldando las protestas de profesoras y profesores y sumarán las del movimiento estudiantil.
El acto con el Tricolor Nacional, indica Mendoza, «nos emociona a todos, porque significa la recuperación de los símbolos de la universidad». Además, poco a poco «se ha dado la renovación de las autoridades: ya renovamos el sector estudiantil, la asociación de egresados, la asociación de profesores. Poco a poco la presencialidad ha sido un hecho, pudimos hacer la apertura del comedor, pudimos activar algunas rutas. Todavía no estamos al 100%, pero es algo», destaca.
Hoy día el comedor no está operativo. «Estamos haciendo todo lo posible, pero depende mucho del insumo proteico que pueda dar el Ejecutivo nacional. Todavía estamos esperando. En todo el mes de enero no ha habido comedor y, tampoco, rutas de transporte. Y seguimos con una beca de cinco dólares», subraya.
Sin embargo, afirma, «sentimos que la universidad está cambiando». Es decir, «las reivindicaciones que dependen del Ejecutivo nacional están igualitas, pero las que dependen de la universidad, que es la recuperación de nuestros espacios, la presencialidad, volver a las aulas, que los profesores vuelvan a dar clases, recuperar nuestros símbolos como la Bandera y la infraestructura los ucevistas las estamos recuperando en un ambiente distinto».
Hace dos años la UCV estaba vacía, rememora Mendoza, ya que los profesores no asistían. «Estaba reinando la inseguridad, estaba reinando una comisión presidencial que hacía lo que quería. Ahora estamos los ucevistas tomando nuestros espacios, hay una presencialidad y estamos nosotros siendo los guardianes de la autonomía universitaria. Y, una cosa que no teníamos hace mucho tiempo: estamos renovando las autoridades a través de un proceso democrático».
-¿Qué mensaje le envía al país la renovación del liderazgo?
-Que el voto es un camino indispensable, el voto es un camino para cambiar las cosas y hay que cuidar el voto. El voto no es ir, votar y ya. Hay que ir, votar, pensar en qué candidato vas a votar y cuidar ese voto.
En este momento «todo lo que depende de los ucevistas estamos tratando de recuperarlo, pero todo lo que depende del Ejecutivo el Ejecutivo no da una muestra de voluntad para recuperar. Tenemos sueldos y salarios bajos, becas a cinco dólares, comedor y transporte que no funcionan, previsión social de los profesores casi muerta».
Lo que depende de los ucevistas, «que es volver a las clases, activar los procesos democráticos y revivir nuestra casa de estudios, lo estamos haciendo. ¿Lo que depende del Ejecutivo no? Pues va a haber una comunidad universitaria articulada exigiéndole al Ejecutivo que abra un comedor estudiantil, que en lo que va de año no ha abierto; que se habiliten las unidades de transporte, que en lo que va de año no han salido, que se dé una beca adecuada de al menos 100 dólares y que tengamos una tabla salarial de nuestros profesores adecuada y que no ganen los 30 dólares que ganan ahorita».
-¿Ustedes también radicalizan?
-Nosotros vamos a acompañar todas las protestas de nuestros profesores. Vamos a estar al lado de nuestros profesores, absolutamente.