A pesar de que desde el gobierno de Nicolás Maduro intentaron impedir la manifestación, los maestros lograron tres puntos de concentración y una marcha, con un nutrido número de trabajadores, hasta las puertas del Ministerio Público
Por un salario digno los trabajadores volvieron a las calles de Venezuela este lunes 16 de enero con la principal convocatoria de los maestros. En Caracas algunas maniobras desde el gobierno de Nicolás Maduro intentaron dispersar la convocatoria. Sin embargo, desde la Plaza Morelos, Plaza Venezuela y la esquina de Salas, tres grupos se movilizaron y se unieron en la avenida México para marchar hasta la Fiscalía General de la República.
Los trabajadores demostraron la capacidad que tienen de aglutinar todas las fuerzas gremiales y que los esfuerzos por desarticularlos desde la administración de Maduro no los podrán callar tan fácilmente.
Los maestros pusieron los puntos claros y aseguraron que su objetivo no era confrontar con el oficialismo, sino que su único objetivo es el justo reclamo de un salario y un contrato colectivo ajustados a la realidad económica del país y que les permitan cubrir sus necesidades.
«Nosotros no estamos buscando enfrentarnos a nadie, estamos exigiendo que se discuta una contratación colectiva, que la ministra de Educación atienda a las 17 organizaciones sindicales», advirtió el presidente del Sindicato Venezolano de Maestros de Distrito Capital, Edgar Machado.
«Nosotros estamos reclamando y exigiendo nuestro derecho, nosotros no estamos exigiendo nada regalado, todo es dentro de la Constitución», defendió la dirigente de los gremios de bioanalistas, Judith León.
Cada sector de trabajadores que acompañó la manifestación llevó su propia consigna, sus propias pancartas y cacerolas, pero todos bajo un mismo objetivo: reclamar un sueldo que les alcance para vivir dignamente.
La marcha que protagonizaron los trabajadores en Caracas podría definirse como una de las banderas de la solidaridad integremial en este momento de lucha por los derechos laborales que se han visto violados.
«Y no, y no, y no nos quitarán el derecho a protestar», fue la consigna que se escuchó en las puertas del Ministerio Público.
En otro punto de la manifestación se llegó a escuchar, «policía escucha, esta es tu lucha» dirigiéndose a los cuerpos de seguridad.
También rechazaron el pago a través del Sistema de la Patria que hizo el gobierno de Nicolás Maduro. «Yo no quiero bono, yo quiero mi sueldo», le dijeron desde las calles de Caracas.
La indignación también se hizo presente a las afueras de la Fiscalía cuando un enfermero con zapatos rotos en las manos y patas de pollo colgando, haciendo alusión a la situación de los trabajadores sanitarios, reclamó por las camionetas de lujo que utilizan los funcionarios del Estado.
«Mientras que ellos tienen las mejores camionetas nosotros estamos descalzos», reprochó el trabajador frente a un vehículo oficial del Ministerio Público.
Al finalizar la movilización, las adyacencias de la Fiscalía se convirtieron en la sede de varias asambleas de trabajadores en las que solo se escuchaba una y otro convocatoria para volver a las calles a seguir luchando por un salario justo.
Desde ya hicieron cita para verse en las calles de Caracas el próximo 23 de enero y durante los días que restan de esta semana.
El dirigente, Pablo Zambrano, reiteró que «es una lucha de la clase trabajadora en contra de la patronal sea pública o privada» por lo que pidió que no se saque provecho de la organización sindical.