Humberto Figuera, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), indicó que las restricciones de vuelos se hacen con base en la información sobre la perturbación atmosférica que toca las puertas del oriente del país. En la medida en que haya vientos fuertes se suspenden las operaciones, recordó, por lo que es posible que desde este martes suspendan operaciones aéreas.
La previsión es importante y las autoridades tienen que ser previsivas, pero no hay que crear una alarma innecesaria, destacó.
En respuesta a la reanudación de vuelos directos a Brasil, Figuera señaló que toda conectividad es importante para un país, y dijo que ojalá vuelvan a operar las líneas brasileñas que se retiraron, y que las líneas venezolanas retomen sus operaciones. Hay un mercado interesante de pasajeros, como el que hubo entre Brasil y la isla de Margarita.
Hay otros países importantísimos para la industria del turismo, como Colombia, Chile y Argentina, y ojalá se retomen las operaciones pronto, subrayó en entrevista con Unión Radio. DE Chile hay dos interesadas, de Argentina al menos una y dos de Colombia.
Recordó que, según el INAC, los cielos de Venezuela están cerrados para muchos países. «Hay un decreto de emergencia que está vigente», reiteró. Pero «hay una realidad en el mundo, y es que el mundo se abrió. El único país que tiene sus cielos cerrados para el mundo, salvo para siete países, es Venezuela».
En cuanto a las rutas nacionales destacó que están todas operativas y que, dependiendo de las demandas, algunas están más activas que otras. Es una lucha de las líneas aéreas para mantenerse operativas, refirió, y eso depende de que haya pasajeros. «Hay demanda, pero las líneas no pueden volar a pérdida», y si en un destino hay demanda para dos vuelos «eso es lo que proponen».
En Venezuela hay nueve líneas aéreas operativas, recordó. «Tienen que buscar nuevos mercados, ir hacia el Caribe, como lo hacían antes».