Rafael Nadal se convierte en historia viva del tenis. Se consagró campeón de Roland Garros por decimocuarta vez, tras vencer a Casper Ruud, en la final por 6-3,6-3 y 6-0. Siempre que llegó a la final en París, se fue victorioso (14 de 14). Muchos jugadores han dicho que ganarle al mallorquín en el Bois de Boulogne es el mayor desafío para un deportista, y Rafa, una vez más, lo confirmó.
El tenista español puso otra pica más de gloria en la central del torneo parisino. El balear llegó a la cita con muchas dudas físicas por su lesión crónica en el pie izquierdo, las alimentó en estas dos semanas (antes de enfrentarse a Djokovic dijo que no sabía si sería su último encuentro en Roland Garros), pero sobre la pista su dominio resultó igual de incontestable que siempre. Venció al número uno del mundo en cuartos, sometió en semifinales a Zverev antes de que el alemán se lesionara de gravedad y, en la final, Ruud no fue oposición para él.
Un 5 de junio de 2005 levantó su primer Roland Garros y otro 5 junio alzó su 14º. Es su Grand Slam número 22, dos más que Djokovic y Federer.
En el debate para ser el mejor tenista de todos los tiempos, Rafael Nadal, ha vuelto a dar hoy un golpe sobre la mesa. Pocos cuentan con Federer para seguir sumando por su lesión en la rodilla que lo tiene sin jugar dos años y Djokovic, que hace apenas un año parecía el favorito para ser el líder en trofeos dentro de los ‘majors’, su negativa por negarse a vacunarse contra el coronavirus ha mermado la obtención de títulos del serbio.