La temporada que se reanuda este domingo en Tokio, contará con espectadores por primera vez desde hace seis meses, una medida de precaución adoptada para evitar una extensión de la pandemia de coronavirus, según acordaron este lunes dirigentes deportivos
El sumo, un deporte con 1.500 años de historia y que sólo se practica profesionalmente en Japón, tenía su temporada en suspenso desde el torneo que se disputó en marzo pasado en la ciudad occidental de Osaka.
Pero, a diferencia de los combates de enero, en Tokio, los de Osaka se realizaron sin espectadores en las gradas, por primera vez en la historia de ese deporte.
Para el pasado 10 de mayo se esperaba la reanudación de la temporada en Tokio, pero la fecha fue aplazada hasta el 24 de mayo y, de nuevo, quedó postergada hasta este domingo. El torneo de julio en la capital nipona se prolongará durante dos semanas.
En una reunión celebrada este pasado martes por directivos de la Asociación de Sumo de Japón, se decidió volver a tener combates a partir de este próximo domingo, en esta ocasión en la arena tokiota de Ryogoku Kokugikan, considerada como el santuario de ese deporte.
Pero, al igual que otros deportes que desde el pasado viernes han comenzado a aceptar espectadores, el lugar donde se disputarán los combates desde este domingo aceptará sólo 2.500 aficionados, para una arena que tiene capacidad para unos 11.000 asientos.
Varios luchadores de sumo se han visto infectados por el nuevo coronavirus, según fuentes de la asociación, y uno de ellos, un luchador de la cuarta división profesional, de 28 años, pereció en mayo pasado por la COVID-19.
Con información de EFE