Tapabocas, menos entradas para ingresar, rutas claramente definidas para circular dentro del recinto y toma de temperatura forman parte del esquema de la «nueva normalidad»
Desinfectante en las manos, pistola de temperatura, una ruta clara para circular, menos entradas abiertas. Aunque formalmente no les han dado el okey para la reapertura, los centros comerciales se están preparando desde hace varias semanas para entrar en la «nueva normalidad» impuesta por la COVID-19.
Este jueves 11 de junio el mandatario Nicolás Maduro dijo que los centros comerciales se sumarán a los sectores flexibilizados.
Ya la directora de la Cámara Venezolana de Centros Comerciales (Cavececo), había asegurado que estaban listos, con los protocolos claros para volver al trabajo. Cavececo agrupa a 134 centros comerciales, que generan unos 500 mil empleos, y el 13 de marzo, poco antes de comenzar la cuarentena, había formulado recomendaciones para sus afiliados.
Algunos recintos ya están listos para funcionar con base en esa normativa, y la aplican para poder acceder a los locales autorizados para funcionar, como farmacias y venta de alimentos de personas y animales.
En el Centro Comercial Lido, por ejemplo, estas medidas ya se aplican. En primer lugar solo hay dos entradas abiertas. Al llegar, las marcas en el suelo indican a qué distancia debe permanecer una persona de otra, y si alguien se «hace el loco» los trabajadores se lo recordarán amablemente. A los visitantes les toman la temperatura con estos termómetros, y solo si los grados no son señal de alarma, se puede pasar. En el piso del centro comercial se colocaron flechas para ddefinir claramente cómo circular.