La CPI, con sede en La Haya, fue creada en 2002 para juzgar los crímenes graves en el mundo, lo que incluye a los de guerra y de lesa humanidad.
A petición del Gobierno del presidente Nicolás Maduro, la Corte Penal Internacional (CPI), estudia investigar posibles crímenes de lesa humanidad como consecuencia de las sanciones de Estados Unidos (EE.UU), impuestas a Venezuela.
Así lo anunció este lunes 17 de febrero, Fatou Bensouda, fiscal de la CPI, quien además destacó que ahora la Corte Penal deberá decidir la asignación o no del caso ante una cámara preliminar, que realizará un examen previo y una posterior investigación.
El Ministro de Relaciones Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, declaró en La Haya, haber interpuesto la demanda de Caracas, de lo que según él es una «guerra económica».
Venezuela «solicita a la fiscal que inicie una investigación por crímenes de lesa humanidad presuntamente cometidos en el territorio de Venezuela, a los fines de determinar si se ha de acusar de la comisión de tales crímenes a una o varias personas determinadas», señaló Bensouda.
De acuerdo con las autoridades venezolanas, «la aplicación de medidas coercitivas ilícitas adoptadas unilateralmente por el gobierno de los Estados Unidos de América contra Venezuela, al menos desde el año 2014», constituyen crímenes contra la humanidad.
Washington (EE.UU) impuso en 2019, sanciones a la industria petrolera venezolana, principal fuente de divisas del país, y recientemente lo hizo con la aerolínea estatal venezolana, Conviasa.