El analista expresó que en el país se genera un clima de pugna que no genera violencia «porque el Gobierno quiere diferenciarse de lo que ocurre en otros países»
El politólogo Ricardo Sucre catalogó como un “buen paso” que los estudiantes salieran de la Universidad Central de Venezuela (UCV) durante la marcha del pasado 21 de noviembre. «Tomar la decisión de ir al frente es positivo, pero esta acción puede tener consecuencias como la confianza en los estudiantes, porque para muchos ellos asumieron un riesgo al asistir a la movilización«, dijo.
«El sector de la oposición decía que que era riesgoso asistir a la marcha; ellos revelaron un miedo exagerado, porque pensaron que serían carne de cañón y de represión», destacó.
Indicó que los estudiantes realizaron un llamado a la Fuerza Armada Nacional porque el G-4 regresó a su versión original: exhortar a los militares a hacerle un llamado al primer mandatario nacional, Nicolás Maduro, a realizar un cambio de gestión.
«No hay puntada sin dedal«. Con esta frase explicó que el Gobierno ofreció dialogar con los estudiantes porque trabaja para dar un piso de tranquilidad para las próximas elecciones el venidero año.
Asimismo, señaló que el beneficio de las becas siempre existió, y que no sería viable aplicarlo solo a través del carnet de la patria: «Es un beneficio que no tiene que estar mediado por este mecanismo porque sería una manipulación«.
Respecto al deterioro de la UCV, refirió que esto ocurre porque hay un enfrentamiento entre el Gobierno y la casa de estudios. «Al no poderla controlar por la vía electoral, la deterioran en el ámbito económico y con sistemas paralelos como las misiones», acotó.
En este sentido, agregó que hay una «agresión institucional«, con plantas físicas agotadas, además de la afectación por la diáspora de profesores.
Sucre manifestó que el Día del Estudiante siempre ha sido una fecha de celebración, pero también de protesta.