«Todo el mundo entra allí, incluso los sectores radicales que son los protagonistas de todas las torturas así como de los tratos crueles e inhumanos del hemisferio», dijo el abogado
El escaño que ha obtenido Venezuela ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas es considerado como “un golpe moral y espiritual a muchas expectativas”, indicó el coordinador de la ONG Defensa por los Derechos Civiles, Rafael Narváez.
El también abogado reiteró que los «diplomáticos fallaron» en sus intentos de propiciar que Costa Rica se quedará con el asiento ante el Consejo y ahora este escaño es «ocupado nuevamente por un Estado indolente que desprecia al ser humano, que está siendo cuestionado desde el 2014».
Narváez indicó que «todo el mundo entra allí, incluso los sectores radicales que son los protagonistas de todas las torturas así como de los tratos crueles e inhumanos del hemisferio».
Finalmente, recordó que «el Consejo General de Derechos Humanos que fue creado en el 2006 de Kofi Annan, para buscar un mecanismo donde pudiera reivindicar la ONU porque existía una comisión de derechos humanos que la desprestigiaba».