La izquierda venezolana que no respalda la gestión del mandatario Nicolás Maduro busca su camino en medio de una crisis total que no pocos expertos han llamado «la tormenta perfecta», y a la que se suman las sanciones al país y la decisión de la Administración Trump de bloquear todos los bienes del gobierno venezolano en territorio estadounidense.
Hay partidos y movimientos de izquierda que siguen dando su apoyo a Maduro, a pesar de la crisis de legitimidad generada por las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018, no reconocidas plenamente en el ámbito nacional y el internacional.
Otros partidos y movimientos -los que cuestionan a Maduro, entre otros factores, por considerar que ha dado un viraje autoritario- están redefiniendo sus programas y estrategias, incluso para un país en el cual la oposición sea gobierno y el chavismo sea oposición.
Este jueves 8 de agosto comenzó, en la Parroquia Universitaria de Caracas, un debate de dos días sobre el futuro de la izquierda venezolana.
López Maya insistió en que la izquierda venezolana, antes de pensar en salvar el planeta, debe unificarse con todos los sectores para la recuperación de la democracia.
La socióloga Anais López señaló que la izquierda que apoyó al presidente Chávez no solo guardó silencio ante medidas y decisiones, sino que despreció el conocimiento y la eficiencia.
Las izquierdas que avalaron a Chávez dieron el salto hacia el socialismo sin formulación teórica y con más voluntarismo que formación, subrayó el dirigente Sergio Sánchez.
La violación de los derechos humanos y la corrupción son dos grandes deudas de la gestión del chavismo, aseveró Luis Lander, director del Observatorio Electoral Venezolano.
Los derechos humanos, la defensa del ambiente y la lucha contra la pobreza son tres áreas en las que la izquierda venezolana debe poner su mejor empeño, manifestó Lander.