Se trató de un jardinero que residía en Catia
Celso Guillermo Vaamonde (60) murió a las 8:00 a.m. del pasado domingo 24 de abril. Estaba recostado en su cama. Su hermana mayor fue quien detectó que no presentaba signos vitales, y lo reportó a la policía científica.
Más temprano, Vaamonde se encontraba en el sector Los Cedros, Ruperto Lugo, en Catia, ciudad capital. Estaba reunido con varias personas, con quienes ingería licor.
Aproximadamente a las 5:00 a.m., cuando se disponía a retornar a su hogar, sector La Bomba -dos calles más abajo-, varios jóvenes lo golpearon, hasta dejarlo inconsciente en el suelo.
Vecinos llamaron a sus parientes, quienes lo auxiliaron y llevaron a su casa. Tenía la cara ensangrentada y manifestaba dolor.
Según el protocolo de autopsia, Vaamonde murió a consecuencia de una hemorragia interna, producto de los golpes.
La víctima se desempeñaba como jardinero, en las residencias La Fundación, situadas en Alta Vista, Catia. Era padre de un adolescente de 15 años de edad y el penúltimo de ocho hermanos.
Hasta ahora se desconoce el paradero de los implicados en el hecho.