En la oposición somos la mayoría, pero la que no acciona, afirma la secretaria general de Acción Ciudadana en Positivo (ACEP). «El partido de gobierno lava los trapos sucios en casa y a la oposición le encanta ventilarlos»
La frase que identificaría el trabajo político de Griselda Reyes es «ni rojos, ni azules: venezolanos». Porque la secretaria general de Acción Ciudadana en Positivo (ACEP) quiere unir voluntades de todos los sectores. Su horizonte inmediato son las elecciones parlamentarias y las de gobernadores y alcaldes, pero no es el único. La ruta que se ha trazado es votar, y cambiar el país por la vía del sufragio y no con otros métodos.
Reyes insiste, en conversación con contrapunto.com, en que es responsabilidad de la oposición organizarse y crear los medios para ir derrotando el poder de Nicolás Maduro.
La judicialización ha sido un tema difícil y complicado, lo ideal es que cada organización pueda resolver sus conflictos internamente y no llegar al TSJ, afirma. Pero las organizaciones políticas deben revisarse, cumplir con sus estatutos y reglamentos para mantener la democracia interna, agrega de inmediato.
ACEP ya vivió el terror de una intervención. «Nosotros sufrimos un ataque, intentaron quitarnos nuestra organización, un grupo de personas ajenas a ella; demostramos que nunca han estado en la organización, que no forman parte de nuestras estructuras. El CNE actuó, respondió y dio la cara en todo momento para resolver el posible conflicto que querían crear», relata. Van a cumplir dos años constituidos como organización política nacional.
-¿Tiene temor de que le quiten el partido?
-Siempre va a existir. Los ataques no son solo de un extremo. Los ataques son de ambos extremos. En algún momento tienes miedo de elevar la voz, porque vas a estar bajo la lupa. La realidad es que constituimos una organización política plural, con una ideología de centro liberal humanista, con una realidad en la base ciudadana. El miedo te permite analizar e ir más allá de la rutina diaria, evaluar las acciones y qué te puede afectar. Actuamos con mucha inteligencia; somos profesionales de la salud, contadores, auditores, administradores, arquitectos, ingenieros, amas de casa, electricistas. Estamos constituidos del sentir venezolano.
-Eso no los puede salvar.
-No nos puede salvar, pero sí estamos dando una demostración de que se pueden logra las cosas.
Griselda Reyes es muy contundente en su caracterización del gobierno de Maduro.
-Para mí es un desgobierno que no tiene legitimidad de origen ni de desempeño. Es una administración que ha fracasado en algo tan sencillo como los servicios básicos para tener calidad de vida; no está administrando ni gobernando. Es complicado, porque aparte tienes la pandemia a la que no se le ha dado el trato que se debió dar. Algunas actuaciones desde el inicio fueron inteligentes, pero en la medida en que avanzan los meses el venezolano necesita trabajar para poder subsistir, y esta administración no previó que quedarte en tu casa resguardado implica que no vas a tener recursos ni para la comida. Debes ir a la calle, no tenemos agua para lavarnos las manos, no tenemos dinero para gel o jabón. El venezolano no tiene la capacidad de poder decir que va a comer tres veces al día. Te hablo del venezolano de a pie, que vive en la zona rural, clase media hacia abajo que ha sido totalmente olvidada y la desconexión ha sido evidente.
-El CNE ahora plantea que las elecciones pueden durar más de un día.
-Somos una organización provoto, nacimos con esa convicción y estamos tratando de que siempre sea respetada esta condición. Este es un gobierno autoritario, no hay respeto por las libertades, no puedes pretender que te van a decir «aquí están las condiciones electorales», o que tienes cubierto todo lo que estás exigiendo para que pueda haber elecciones libres y transparentes. Cuando tienes el poder y eres un gobierno autoritario vas a hacer lo posible por mantener el poder. Es responsabilidad de la oposición organizarse y crear los medios para ir derrotando ese poder. ¿Cómo lo logra? Participando en proceso electorales, ir disminuyendo su capacidad de acción. Debemos dar la batalla en el escenario, sea cual sea.
-¿Irían a un proceso que dure más de un día?
-Estamos preparados, postulados los candidatos en los 23 estados y el Distrito Capital. En este momento no vamos en alianzas nacionales. Nuestra alianzas fueron de ciudadanía, profesionales, gremios.
-¿Están dispuestos a negociar?
-Para que se dé una alianza debe haber una negociación y ceder. Estamos dispuestos a una alianza siempre que no nos veamos obligados a ceder nuestros liderazgos regionales, o por encima del bienestar del país. Eso no estaba claro, y por eso decidimos avanzar y construir.
-¿No debilita el planteamiento de unidad y alternativa al madurismo?
-Puede facilitarle al chavismo que lleve más diputados. La lista nacional permite que por bloque se metan por la ventana. Pero, ¿qué sucede? No puedes hacer una alianza cuando los partidos tienen el mayor porcentaje de rechazo de la historia. ¿Con quién hago la alianza? Si la hago con la mesa de diálogo, me llaman colaboracionista; si la hago con los «alacranes», soy «alacraneada». La realidad es que nosotros no hemos militado en ninguna organización política. La gente quiere algo diferente. Nuestra meta es llevar candidatos que estén conectados con el estado. Estamos apostando a que la gente no vote por el partido, sino por rostros y caras visibles.
Griselda Reyes precisa un par de cosas: no están cerrados a posibles alianzas y no han podido debatir internamente qué pasará si las elecciones se celebran durante varios días. Pero reitera que, a quienes ejercen el poder, «no les conviene que salgamos a votar masivamente. Somos la mayoría, pero la que no acciona». Aclara también que si la votación no es con máquinas, sino manual, tendrían que discutirlo.
«Hoy tenemos tres asambleas, dos presidentes, dos TSJ. Es el país de la dualidad. ¿Dónde quedó nuestra Constitución? Y seguramente el 7 de diciembre serán tres asambleas. Tanto que se peleó la Constitución, y ahora la nombramos cuando nos interesa», reprocha.
Es cuidadosa con lo que plantea. «Estamos en un país en el que todo lo que dices es usado en tu contra. Empiezan los fanáticos a desvirtuar lo que estás diciendo». Advierte que hay censura del ejecutivo contra los medios de comunicación, pero que también algunos medios impiden que se cuestione a dirigentes, que se rebatan políticas.
Asegura que intentaron contactos con el llamado G4 opositor, contrario a la participación en las parlamentarias en estas condiciones. Trataron de buscar acercamientos para un gran encuentro «pero no se logró, no avanzó».
En su opinión «el menosprecio entre las mismas organizaciones políticas ha marcado diferencias y distanciamiento. El partido de gobierno lava los trapos sucios en casa y a la oposición le encanta ventilarlos».
Reyes defiende su postura provoto: «El territorio no se cede. No puede ser posible que hayamos perdido alcaldías y gobernaciones; hay gente que ganó un Concejo Municipal con los votos de su familia».
«La realidad es que las minorías están gobernando a las mayorías, y eso lo hemos permitido nosotros desde el bastión de la abstención», subraya. «El venezolano está muy cansado de los potes de humo. El ciudadano siente cuando algo es mentira, o no le complace. La realidad es que las propuestas no satisfacen las necesidades de la ciudadanía».
-¿Lo electoral sí?
-Sí. Cuando vas a las barriadas y las comunidades, y preguntas si la gente prefiere la intervención o la vía electoral, ves que el venezolano no quiere confrontaciones, está cansado de la confrontación. Si decido cambiar me quitan el CLAP, pero ¿qué me va a dar la oposición? ¿Me va a dar algo?
¿Activarían el revocatorio contra Maduro? Responde con rapidez: «La oposición vocifera tanto que el desgobierno se encarga de la idea y terminamos buscando la pelota en vez de patearla».