Emilio Lovera: “La gente que está en el poder y la que aspira al poder son el circo de todos los días que nos distrae”

«No somos un pueblo que luche ni que considera a Venezuela como suya», dijo el humorista quien afirmó que «la gente común» no tiene conocimiento del verdadero nivel de corrupción que existe en el país

El humorista Emilio Lovera cambió sus chistes por una reflexión sobre la realidad del país en la que destacó la necesidad de un cambio en la mentalidad “conformista” de los venezolanos y aseguró que los políticos solo distraen a la población pero se reparten lo que queda en el país.

«La gente que está en el poder y que aspira al poder son el circo de todos los días que nos distrae haciéndonos pensar cosas pero solo están repartiéndose lo que queda», dijo en un video difundido en las redes sociales que se hizo tendencia este lunes.

Lovera cuestionó que son muchos los que se conforman con una bolsa del Clap y considera que cambiar la mentalidad de los venezolanos tardará mucho tiempo.

«Para cambiar ese pensamiento por otro que diga ‘yo voy a procurarme mi propia bolsa del Clap y voy a procurarme un país donde yo pueda escoger qué meter dentro de mi bolsa del Clap’ va a pasar mucho tiempo», dijo.

Cree que los medios de comunicación y las redes sociales «nos ha medio salvado», pero, a su juicio, “no somos un pueblo que luche ni que considera a Venezuela como suya”.

Para el humorista, actualmente los que más valoran al país son los venezolanos que emigraron porque ya compararon al país con el exterior.  Asimismo, indicó que las personas que se forman opiniones en la calle no tienen «ni la más remota» idea del nivel de corrupción ni de la situación del país.

«La gente común no sabe cuánto cuesta un Ferrari (…) y les cuesta entender la diferencia entre 20 mil dólares y 200 millones de dólares”, expresó.

«Habría que buscar un programa para hacerle a entender a la gente que el valor de ese Ferrari se puede abastecer el hospital al que llevas a tu mamá para que le hagan tratamiento por un año, para todos los tratamientos, y el dueño del Ferrari se robó para comprarse 20 Ferrari», concluyó.